Clarín lo dijo en una nota de hoy llamada: La nueva administración en Bagdad, una virtual "contratista" de EE.UU de la que extraímos el siguiente párrafo:
El nuevo gobierno no tiene mando alguno sobre los ejércitos extranjeros que permanecen en su suelo (podría pedir su retiro, pero sólo en teoría) y tampoco podrá modificar ninguna de las leyes más importantes por las cuales la anterior autoridad impuso un modelo económico y social y concedió a empresas extranjeras multimillonarios contratos.
Y luego, la opinión de Paula Lugones:
"Señor presidente, Irak es soberano. Condi." Así rezaba el papelito escrito a mano que Condoleezza Rice deslizó a George Bush en la cumbre de la OTAN. "¡Que reine la libertad!", le garabateó el mandatario como respuesta. El calculado mensaje, que funcionarios se apresuraron a mostrar a la prensa, sintetiza la fantasía que EE.UU. intenta plasmar sobre el traspaso. El concepto de soberanía fue acuñado por Jean Bodin en el siglo XVI y perfeccionado por Jean Rousseau en el XVIII. Es la autoridad ilimitada del Estado hacia el interior (sobre su territorio, habitantes, ordenamiento jurídico y social, sin intromisión de otros países) y exterior, sólo restringida por los derechos individuales o el derecho internacional. Muy lejos de la nueva realidad iraquí.
En Santos y Demonios lo venimos diciendo desde el comienzo.
Qué gratificante leer ese tipo de información en medios de comunicación masivos, te despertaste Clarín (por lo menos en un aspecto, pero es un avance), pueden leer el artículo completo aquí.
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